Primero, quiero hacer referencia a varios tipos de semilleros que me permiten tener un orden en la distribución de las plántulas sembradas en la huerta: se pueden hacer unos rollitos de papel periódico en forma de vasito, los tubitos de cartón del baño o reciclar vasitos o botellas pequeñas llenarlos con tierra cernida y ubicar dentro semillitas previamente colocadas en remojo por 2 o 3 horas ante de sembrar. Los vasitos de cartón y papel se pueden sembrar en la huerta cuando tienen alrededor de 7 centímetros evitando el trasplante de las plántulas, este material se va degradando dentro de la tierra. Esta es el producto de un buen compostaje que hago con los residuos orgánicos de la cocina, pasto y hojas secas, enriquecido con materia fecal seca de vaca finamente desmenuzada
El riego del semillero debe ser 2 o 3 veces por semana
según sea la Temperatura donde se ubica.
Si el caso es en ambientes mayores a 25º C y el sol es muy directo,
es conveniente tratar de
suministrar algún sombrío, se
puede colocar una fibra plástica
llamada polisombra la cual se encuentra de varias clases: una muy tupida, otra
intermedia y otra más densa; hay que
analizar cuál es la más conveniente. En estos tiempos, los rayos solares son
mucho más fuertes y directos en estos climas, así menguamos un poco el maltrato, deterioro, o quema parcial o total de la hojas.
Cuando la planta
de tomate va tomando cuerpo y crece unos 20
o 30 centímetros se le amarra un lacito a una vara, para que sostenga y se desarrolle con un poco más de altura, de
lo contrario quedaría rastrera y se dañaría por la humedad
Cuando la planta de tomate va creciendo a unos
20 o 30 centímetros se le amarra un
lacito a una vara, para que se sostenga
y se desarrolle con un poco más de altura, de lo contrario quedaría rastrera y se dañaría
por la humedad
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